Con la llegada de los primeros fríos del invierno, el consumo energético en calefacción aumenta hasta llegar a más de 50% del total en la mayoría de los hogares. Este consumo es suficientemente importante como para dedicarle un tiempo al estudio de cada caso para elegir el sistema que más convenga en función de cada hogar.
Existen diversos sistemas sin instalaciones importantes para mantener una temperatura confortable en el conjunto de la vivienda sin malgastar energía.
Calefacción eléctrica conemisores térmicos:
Emisores térmicos |
El emisor térmico es un sistema altamente eficaz y fácil de instalar. Los emisores térmicos se suministran con un cable y un enchufe para conectar directamente a un enchufe. Existen emisores térmicos con distintas potencias que se adaptan a todas las estancias, con el crono termostato integrado y la selección de temperatura podremos adaptar perfectamente la temperatura de cada habitación o incluso apagar las estancias que no utilizamos.
Radiadores de aceite eléctricos y convectores:
Los radiadores de aceite son una solución ideal para complementar otros tipos de calefacción. Ofrecen la flexibilidad de poderlos situar alejados de las paredes y las ruedas incorporadas permiten moverlos fácilmente. El consumo puede ajustarse con el regulador de temperatura y si añadimos un simple temporizador tenemos la posibilidad de ajustar perfectamente en que horarios queremos que estén en funcionamiento durante el día. Por otro lado, los convectores son muy adecuados para espacios reducidos que deban calentarse de forma rápida y por un espacio corto de tiempo, tipo baños o habitaciones pequeñas. Para calentar bajo mesas siempre se puede optar por los ya conocidos braseros eléctricos.
Estufas catalíticas, calefaccióncon gas butano:
Las estufas catalíticas han venido siendo una solución muy práctica de alto rendimiento si valoramos su relación consumo-poder calorífico. Con una potencia de hasta 3.000W, el consumo de las estufas catalíticas o estufas de gas es realmente económico. Como desventaja, son aparatos voluminosos a la hora de guardar y no es recomendable que funcionen sin la supervisión de un adulto de forma constante, con lo cual no podemos programar su funcionamiento de forma eficaz como es el caso de los radiadores de aceite o los emisores térmicos. Un caso similar sería el de las estufas de parafina, con unas características similares pero con un tamaño mucho más reducido.
Estufa de leña |
Estufas de leña, las más románticas de la serie…
Las estufas de leña no necesitan presentación, fabricadas en hierro fundido tienen un aspecto robusto y rústico. Requieren una instalación para la evacuación de humos pero una vez instaladas dan calidez a cualquier estancia. El poder calorífico de la leña es ya conocido y por ello son ideales para viviendas situadas en zonas muy frías y con fácil suministro de leña.
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